La obra analiza las características las migraciones internas y externas, destacando los aspectos positivos y negativos para África y Europa, con el objetivo de acabar con la concepción etnocéntrica del desarrollo, cuya exportación no ha podido retener a los africanos en sus tierras nativas, para empezar a tomar en cuenta sus necesidades y aspiraciones de desarrollo humano y sus necesidades de supervivencia y estabilidad interna.