Los cuentos de La casa del orgullo están situados en las islas Hawai,
donde "la tierra y el mar respiran por turno". Sin embargo, en este
paraíso el hombre blanco ha propagado "la palabra de Dios" y "la palabra del Ron", ha introducido un rígido sistema de explotación económica y de segregación racial, y ha traído, sobre todo, enfermedades desconocidas y fatales como la lepra, "la marca de la bestia".
London enmarca en esta atmósfera crepuscular un dramático recuento de pérdidas y supervivencias, de cruciales reconocimientos afrontados con valor o con cobardía, pues "no es bueno para nadie tener que verse como realmente es, como tampoco es posible verse asi durante mucho tiempo y sobrevivir
a la experiencia".
Jack London nació en San Francisco en 1876, hijo ilegítimo de un
astrólogo ambulante que pronto los abandonaría a él y a su madre, una joven "huída" de una familia acomodada de Ohio, que poco después se casaría con John London, de quien el hijo tomaría el apellido. Jack dejó el colegio a los trece años y hasta los veintisiete tuvo una juventud inquieta y agitada. A esa edad se consagró ya como escritor. Murió de una sobredosis de morfina y atropina en su rancho californiano en 1916.