En trineo y a caballo hacia los leprosos abandonados de Siberia es un libro que encaja a la perfección en el subgénero de la literatura de viajes que puede denominarse aventuras de las indomables damas victorianas. Cuenta el viaje, casi inverosímil en sus peripecias, de una mujer que se adentra sola hacia uno de los lugares más inhóspitos del planeta, armada únicamente con un par de cartas de recomendación de la Reina Victoria de Inglaterra y de la Zarina Maria Fiódorovna, cuarenta libras de pudding de ciruelas, y mucha buena voluntad. Clásico a la altura de La Biblia en España de George Borrow, es un libro-memoria repleto de acción y aventuras, así como de descripciones conmovedoras de las crueldades humanas y de la naturaleza salvaje de Siberia, que ofrece una visión de la vida de la Rusia de finales del siglo XIX tan romántica como singularmente realista, revelando la tenue línea entre viaje, vida y fantasía que marcó los escritos de los grandes viajeros de la época.
